Sirius Patrulla Canina es un proyecto de la lobezna María Joaquina Alejandro Vázquez CUM NLN1710069, nace como resultado de la necesidad detectada en la comunidad de ayudar a los perritos en situación de calle o abandono.

Logrando este objetivo a través de estas acciones:

Brindándoles un hogar temporal, comida y atención médica.

Buscando un hogar, familia y/o institución que les brinde una vida digna.

Concientizando a las personas que no son juguetes sino mascotas y parte de la familia.

Apoyando y fomentando la adopción y no la compra.

El proyecto inició en octubre de 2017 y culminó en abril de 2018, durante estos 6 meses se lograron rescatar 7 perritos, se realizaron 7 revisiones médicas y se les encontró hogar a 3 perritos.

En el mes de marzo de 2018 se organiza la Operación Croquetón con el fin de recolectar la mayor cantidad posible de alimento para perritos (croquetas, sobres y latas de comida y leche) para apoyar a las siguientes instituciones: Corazones Incondicionales (localizado en Zuazua N.L.) y Patitas al Olvido (localizado en Santa Catarina N.L.) las cuales se dedican a rescatar y cuidar perritos en situaciones de calle y abandono.

Se logran juntar 180 Kg de croquetas los cuales se entregan el 11 de marzo a las instituciones:

Corazones Incondicionales        100Kg

Patitas al olvido                             80 Kg

A la par del rescate de perritos y el croquetón surgen dos proyectos más derivados de la detección en los niños en situación económica vulnerable de recibir juguetes en la época navideña y en el día del niño surgiendo así:

Operación “Dona Un Juguete” a través del cual se recaudan 300 juguetes y ropa, los cuales fueron entregados el 7 de enero de 2018 en las comunidades Sabanillas, Maravillas y los Fierros del municipio de Villa de García Nuevo León.

Operación “Día del Niño” Ahora, además de juguetes, recibimos ropa, zapatos y donativos en efectivo que permitió realizar el 29 de abril de 2018 una celebración del día del niño entregando la ropa y zapatos y realizando un convivio donde se comparten alimentos y se realiza una actividad donde se quiebran 2 piñatas, se regalan bolsitas de dulces y reciben la visita de payasos.

Estas actividades se realizan gracias al compromiso y dedicación de la lobezna, sus papás, su hermana, sus abuelitos, sus tías, sus viejos lobos, sus hermanos scouts del grupo 43 Kimball, sus vecinos, compañeros de escuela y compañeros de trabajo de su papa que siempre estuvieron dispuestos a apoyar.