Durante la cuarentena y al tener clases en línea, estoy teniendo la oportunidad de trabajar en una tienda naturista llamada “El Edén”. Si bien, no es netamente mi campo laboral, es un área que va muy de la mano y me permite poner en práctica muchos de mis conocimientos en cuanto a anatomía y fisiología. En la tienda, muchísimo más allá de solo conocer los productos y sus usos (que es algo muy demandante), es conocer precios, aprender a hacer facturas, a hacer notas, inventarios, estar al pendiente de cuando se termina algún producto para volverlo a surtir, acomodar la mercancía cuando llega, revisar fechas de caducidad y ser empáticos con los clientes. Sin duda alguna, ha sido una oportunidad muy interesante para introducirme al mundo laboral y darme cuenta de las responsabilidades de un adulto. Al trabajar en esta tienda, he podido crecer personalmente y he tenido la posibilidad de solventar gastos personales, lo cual me emociona mucho pues he podido adquirir cosas que necesito para la universidad o pagar cosas para uso personal como libros, etc.

Reitero la importancia de esta horquilla para nuestro crecimiento personal y la futura introducción al mundo laboral. Independientemente de nuestra formación académica, cualquier trabajo es una buena prueba antes de salir a explorar el mundo de los adultos y convertirnos en agentes de cambio desde nuestra profesión o nuestro oficio. El trabajo que tengo, al tener trato directo con clientes, es solo el inicio del trato que tendré con mis pacientes una vez que egrese de la carrera.