Cirugías, quimioterapias, trasplantes, accidentes automovilísticos y otras muchas condiciones requieren transfusiones sanguíneas urgentes, de las cuales, dependen las vidas de tantas personas que se enfrentan a estos sucesos. Por esta razón, al igual que la donación de órganos,
la donación de sangre, se convierten en una acción fundamental y vital en la mejoría de muchos pacientes.
Muchas de las veces que hay campañas, las personas que transitan por el lugar están desinformados de aquella actividad o les da miedo donar por distintas razones sin justa causa, convirtiéndose la donación en un tema muy complicado para atraer al transeúnte, por ejemplo (Miedo a las agujas, transmisión de enfermedades por medio de la punción, subida de peso, entre otras)
Además, en Norte de Santander, desde hace varios años existen índices alarmantes de una masiva infección de enfermedades de transmisión sexual por distintos motivos que van desde la falta de educación sexual, como prácticas indebidas en el coito; otras de las causas las cuales
degeneran la calidad de donante al habitante, es la masiva problemática social frente a vicios “Comunes” (Cigarrillo, cerveza) y también la alimentación no adecuada frente a las enfermedades que ello puede conllevar (Diabetes, hipertensión, anemia, obesidad, entre otras).