Mi experiencia en el Tapatón Scout CDMX 2018
El proyecto "Tapatón Scout" de cada año es amado, esperado y odiado por muchas personas. Si me preguntan a mí, yo soy de las que lo aman, a continuación les contaré el porque: El proyecto llegó a mis oídos por una amiga lejana, siendo sincera, con certeza no sabía de que era y menos en que rollo me estaba metiendo, pero si se trata de ayudar, no lo dudo. Cuando me contactó el coordinador y me platicó más, estaba muy emocionada y nerviosa; quedamos de vernos con todo el equipo en una recolección de tapas, al llegar ahí me daba pena estar con personas que no conocía, sentirme tan fuera de sintonía, lejana. No suelo ser abierta y no fue la excepción, pero me agradaron. Poco a poco fui conociendo al proyecto, envolviéndome en él y a su vez, me relacioné con más scouts, de aquellos apasionados que están dispuestos a cambiar la historia y el mundo, a dedicar más de 3 horas cada sábado, todo por una meta en común. El primer año en el proyecto, fue enriquecedor y a la vez doloroso, pasaron muchas cosas alrededor del Tapatón, lo hice parte de mi vida y mi día a día al hablar en mi casa, escuela y todo lugar a donde fuera de la causa tan humana que hacemos. Pienso que el Tapatón me dio tanto como yo le di porque este segundo año participando en el proyecto, lo aproveché al máximo, como todo ser humano me gusta dar más y más de mí y así lo hice, maduré y crecí tanto gracias a todas las experiencias y todo el trabajo. Satisfacciones por horas de esfuerzo, éxitos por horas de desvelo, tapas por sonrisas. Jamás podré decir lo mucho que me encanta ser parte del proyecto y que año con año quiero estar ahí, progresando con las personas que lo coordinen. Y a las personas que tienen una mala opinión acerca del proyecto, les diré una cosa, pregúntese a ustedes mismos, ¿qué he hecho yo para apoyar? Los dejo con una super frase de Lord Robert Stephenson Smith Baden Powell: "Es importante ser bueno, pero más importante es hacer el bien". SLPS Ariadna Linette Martínez González